Y cuando esta regresa,
El sol tristemente se apaga y esconde.
Noche o día el olor a café
inunda la habitación,
la cuchara se oye contra el cristal,
mientras la mirada
se dirige a las hojas que delante están.
Los ojos amenazan con cerrarse,
un trago del vaso a la garganta,
poco evade el sueño,
el deseo de dormir se atrasa,
e intentando concentrar, otra linea lees.
El sol realiza su recorrido,
la luna me acompaña,
hasta que las pilas se desgastan,
y el cuerpo entre sabanas se esconde.
Un pitido suena,
molesto y escandaloso,
lentamente desperezando,
otro café preparando.
Hugs, perdida.