No siempre tienes esa sonrisa verdadera con la que sorprender a todos, hay veces que tienes caras largas, no te apetece hablar, y te entran esas ganas de llorar de repente de querer estar sólo pero a la vez querer y necesitar ese abrazo que tanto reconforta. ¿Y por que sucede eso? una mala noticia, una pelea, una traicion, una palabra mas alta que otra, una perdia...
¿La mejor venganza ante todo? Sonríe, sé feliz, y no les hagas saber que te dolió.
Trata de mantenerte fuerte ante todo, de sonreírle a los problemas, de no dejar que algo estúpido te afecte, aunque a veces sea muy difícil.
Saca esa sonrisa que enamorará al mundo, porque el mundo esta lleno de caras largas y tristes y lo que mas necesita son caras de alegria, caras con sonrias de oreja a oreja.
Mil millones de sonrisas, perdida
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